miércoles, 29 de octubre de 2014

La Isla Mínima

La Isla Mínima

Director: Alberto Rodríguez

Actores: Javier Gutiérrez, Raúl Arevalo, Jesús Castro, Antonio de la Torre, Nerea Barros, Jesús Carroza.

Guión: Alberto Rodríguez y Rafael Cobos.

Productores: José Sánchez Montes, Mikel Lejarza, Gervasio Iglesias, Mercedes Gamero.

Montaje: José M. G. Moyano

Fotografía: Alex Catalán.

Música: Julio de la Rosa

Producción: Atresmedia Cine, Atípica Films y Sacromonte Films.


Si El niño y Ocho apellidos vascos están siendo las grandes triunfadoras del año respecto a la taquilla (incluso superando al nuevo episodio de Torrente) y Magical Girl parece que se está llevando la mayor parte de los halagos de la crítica, La Isla Mínima es la que ha conseguido aunar ambos aspectos con unas cifras de recaudación más que notables y críticas favorables además de premios en el Festival de San Sebastián.

El nuevo trabajo de Alberto Rodríguez llevaba un tiempo dando que hablar, bien por la expectación que levantaba tras la buena impresión que dejo Grupo 7 o quizás tal vez por la multitud de voces que tras ver el tráiler se lanzaron a compararla al menos estéticamente con True Detective.



A veces la lluvia nos impide ver lo que hay más allá

Con una más que solvente dirección Alberto Rodríguez vuelve a demostrar su dominio del género policíaco con ésta historia ambientada en los años 80, en plena transición política, dónde dos policías que provienen de muy distintas situaciones personales y políticas tienen que trabajar juntos para resolver el caso de la desaparición de dos adolescentes en un pequeño pueblo de las marismas del Guadalquivir.

Son tantas las cosas buenas que tiene ésta película que por muchos momentos consigue hacerme olvidar de todo lo fallido que también posee, esa maravillosa fotografía de Alex Catalán te mantiene hipnotizado frente a la pantalla con un planazo tras otro, el pulso narrativo de Alberto Rodríguez para manejar de manera sobresaliente el tempo de un thriller hace que el interés no decaiga en ningún momento por lo que sucede en la historia y sobre todo el auténtico papelón que se marca Javier Gutiérrez consigue que toda nuestra atención se centre en ese policía tan oscuro como atrayente, en la que sin duda se trata de la mejor actuación de la carrera de éste actor.


Si consigues que tu atención no vaya más allá de esto puedes disfrutar enormemente del film, con un final quizás algo anticlimático si, pero que no por ello estropea todo lo anterior. Pero si empiezas a mirar un poco más allá el castillo de naipes se empieza a derrumbar, por un coprotagonista con el que en ningún momento se consigue empatizar, y no querría yo decir que Raúl Arevalo hace una mala interpretación porque ni aunque lo intentara lo podría hacer, pero es que su personaje no da más de si, juega tanto a la ambigüedad y el secretismo que es imposible conectar con él, al igual que los personajes secundarios que apenas están esbozados y que son totalmente prescindibles para la historia, desaprovechando al inmenso Antonio de la Torre y evidenciando de nuevo que Jesús Castro hasta el momento es poco más que una cara bonita.

Pero dónde realmente todo lo bueno de la película se me viene abajo es en un guión que transita constantemente por territorios ya vistos en multitud de ocasiones, sin una pizca de originalidad ni un planteamiento medianamente atrevido, con una historia demasiado convencional para el extraordinario nivel visual que ofrece la película que la acaba convirtiendo en un regalo con un bellísimo envoltorio pero que al abrirlo descubres que es la misma corbata de todos los años, lo cual te deja con un enorme sentimiento de insatisfacción, porque lo que más te decepciona es aquello de lo que más esperas, esto no quiere decir que La Isla Mínima sea una mala película ni mucho menos, pero tiene tantas cosas buenas desaprovechadas que te hace pensar constantemente en lo que se podría haber logrado con un poco más de acierto en los puntos en los que falla.

Pese a todo sigo confiando en Alberto Rodríguez como en uno de los directores de más talento de la nueva hornada del cine español y creo que en el momento que encuentre el guión adecuado pegará el pelotazo que lleva rondando unos cuantos años y que tanto se merece.

4 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo en que lo menos interesante de esta película es el guión. Importan más los demonios personales de los personajes que la trama, y eso está bien, pero podría haberle dado algo más de interés al caso policial. Aún así una película notable de un director sobresaliente.

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    1. Si, está claro que pese a ser un thriller pesa más el drama de los personajes que lo policiaco, pero es que incluso por ahí el personaje de Raúl Arevalo me cojea, eso si, como dices me parece que Alberto Rodríguez va a más y forma parte de una generación de directores españoles con muy buena pinta.
      Muchas gracias por pasarte a comentar.

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    2. Los demonios personales... ¡bien dicho! Al igual que pasase en True Detective en su momento. Totalmente de acuerdo en lo que a la estética se refiere, Óscar, una verdadera delicia esos planos cenitales.

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    3. Son maravillosos, todos los aspectos técnicos del film demuestran que en España se puede hacer muy buen cine, particularmente creo que estamos en un gran momento que se debe aprovechar para crear afición e industria en el país.

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