viernes, 28 de febrero de 2014

Especial Oscar 2014: Gravity

Gravity

Director: Alfonso Cuarón

Actores: Sandra Bullock (Ryan Stone), George Clooney (Matt Kowalski), Ed Harris (voz del control de la misión).

Guión: Alfonso Cuarón, Jonás Cuarón.

Productores: Alfonso Cuarón, David Heyman, Chris DeFaria.

Montaje: Alfonso Cuarón, Mark Sanger.

Fotografía: Emmanuel Lubezki

Música: Steven Price

Producción: Warner Bros, Esperanto Filmoj, Heyday Films.


Tras la absolutamente espectacular "Hijos de los hombres", Alfonso Cuarón quiso utilizar de nuevo la ciencia ficción para contar una historia que parecía totalmente alejada a éste genero, pero en esta ocasión el mexicano quiso dar un paso más adelante, una película de 100 millones de dolares (¡y como lucen!) en el espacio, repleta de CGIs y con una sola actriz en pantalla durante la mayor parte de su metraje es algo que es dificil de explicar a esos directivos de Hollywood de hoy en día que calculan de manera obsesiva los riesgos de sus inversiones.

Así, la odisea en el espacio de Gravity se convirtió también en la odisea de Cuarón para conseguir llevarla adelante, fueron siete años de espera, escuchando hablar de un proyecto por el que desfilaron nombres como Robert Downey Jr, Angelina Jolie o Scarlett Johansson y al que finalmente se incorporaron George Clooney y Sandra Bullock, y podemos dar gracias de que pudiera realizarse finalmente ya que estamos ante una de esas películas que se quedan grabadas para siempre en la memoria de todo cinéfilo.



Gravity cuenta la historia de la doctora Ryan Stone (Sandra Bullock) en su primera misión espacial, acompañada del veterano Matt Kowalski (George Clooney) encargado de garantizar su seguridad en el espacio pero que debido a un accidente espacial quedan a la deriva con casi nulas esperanzas de supervivencia. 

El hipnótico comienzo sirve para presentarnos a los personajes y que Cuaron con sus efectivos planos secuencia y el mejor uso del 3D que se ha realizado hasta la fecha consiga hacernos creer que estamos volando por el espacio, la sensación de ingravidez que se consigue en el espectador y que ya no se abandonará durante el resto de la película es la clara muestra de que este avance tecnológico debe ser utilizado para potenciar el lenguaje cinematográfico y no como un simple pretexto para encarecer las entradas sin que su uso aporte nada a la película.

Puede ser Gravity un film difícil de definir, ya que en él se mezclan varios géneros desde la ciencia ficción, hasta el thriller y la aventura pasando por el drama. Ha sido el guión escrito a cuatro manos entre Jonas Cuarón y su padre Alfonso lo más criticado de esta película y si bien es cierto que puede que en algún momento sea algo tramposo para explicar las reacciones de los personajes, la prueba de que funciona como un reloj de precisión es que uno no llega a plantearse este tipo de cuestiones hasta que no termina la película y la reflexiona a posteriori, y pese a todo en posteriores revisiones se puede observar que aún conociendo lo que va a pasar la película no pierde ni un ápice de fuerza. Estamos ante una historia de redención, de la lucha del ser humano por superar las dificultades y por encontrarse a sí mismo aunque sea en el lugar más peligroso y solitario que existe, en definitiva del viaje y renacimiento de una mujer (impresionante y precioso ese plano de Sandra Bullock tumbada en posición fetal en la estación rusa).


En cierto modo creo que si se han cargado las tintas contra el guión (tampoco de manera excesiva, no vayamos a exagerar) es porque el resto de los aspectos del film son absolutamente impecables. La dirección de Alfonso Cuarón nos hace ver, por si a alguien le cabía alguna duda que estamos ante uno de las mayores genios de la actualidad, a su conocida capacidad para orquestar esos largos planos secuencias, ya aceptados como su marca de identidad, se une en esta ocasión el hábil uso de la cámara que tan pronto dedica un plano abierto a contemplar la enormidad del espacio como se recrea en un primer plano sobre su protagonista para que solamente con los gestos de su cara y sin necesidad de palabras entendamos por todo lo que está pasando.

Si la dirección de Cuarón es brillante también lo son las interpretaciones de sus protagonistas. George Clooney se pasea por el espacio como un cowboy, pese a que sabemos que no lo fue parece un personaje escrito pensando en él, ya que desborda simpatía, carisma y socarronería, cualidades que precisamente le sobran al actor de Kentucky. Pero sin duda es Sandra Bullock la auténtica sorpresa de la película y la que demuestra todo el potencial que tiene dentro y que puede llegar a desarrollar si se la dirige de la manera adecuada. Con un papel de enormes exigencias físicas y psicológicas, Bullock sin duda alguna realiza la mejor actuación de su carrera, y mantiene la película sobre sus hombros durante la mayoría de su metraje de una manera sobresaliente.


Si hablamos de la dirección y las interpretaciones no nos podemos olvidar de otro de los puntos fuertes de ésta película y es la fotografía de Emmanuel Lubezki, es impresionante como consigue dotar de luz a una película que discurre en el negro espacio, Lubezki utiliza de manera inteligentísima la tierra para iluminar la acción y mostrar la enormidad del espacio exterior en comparación con el ser humano. Son especialmente bellos los momentos en los que el planeta azul se refleja sobre las escafandras de los astronautas, subiendo un punto más la intensidad dramática de la actuación de los protagonistas.


Gravity es en mi opinión la mayor experiencia cinematográfica del año, la película que quedará para siempre en nuestra memoria de éste 2013, un film que nos hace reconciliarnos con el cine y nos hace soñar de nuevo y gane premios o no, debería convencer a esos directivos que nombrábamos al principio (creo que los 700 millones de dolares recaudados lo han hecho) que en ésta época llena de secuelas, remakes y reboots, en el mundo del cine para triunfar a veces hay que arriesgar.

jueves, 27 de febrero de 2014

Especial Oscar 2014: El Lobo de Wall Street

El lobo de Wall Street. Título original: The Wolf of Wall Street

Director: Martin Scorsese

Actores: Leonardo DiCaprio (Jordan Belfort), Jonah Hill (Donnie Azoff), Margot Robbie (Naomi Lapaglia), Matthew McConaughey (Mark Hanna), Kyle Chandler (Patrick Denham), Jean Dujardin (Jean Jacques Saurel).

Guión: Terence Winter. Basado en el libro de Jordan Belfort.

Productores: Leonardo DiCaprio, Riza Aziz, Joey McFarland, Martin Scorsese, Emma Tillinger Koskoff.

Montaje: Thelma Schoonmaker

Fotografía: Rodrigo Prieto

Producción: Paramount Pictures, Red Granite Pictures, Sikelia.


Cuando se estrenó "El Lobo de Wall Street" parecía que todo estaba dicho respecto a los favoritos en los Oscar, la guerra entre 12 años de esclavitud y Gravity había comenzado y parecía que nadie podía meterse entre ellos, pero no contaban con el gran Martin Scorsese y con el que probablemente sea su mayor éxito comercial de los últimos tiempos y en el que mejor ha funcionado el boca a boca, por que el éxito de ésta película no se ha debido a una gran campaña promocional o a unas estupendas críticas en los medios especializados, si no a que la gente salía del cine y rapidamente hablaba con sus amigos para recomendar la película y esto lo he vivido en primera persona cuando en una sola semana cinco personas que no se conocían entre ellas me han dicho que tenía que ir a verla.

El Lobo de Wall Street se basa en el libro autobiográfico de Jordan Belfort, un broker que durante la década de los 90 se hizo inmensamente multimillonario y que terminó siendo declarado culpable de diversos delitos financieros. Así que estamos ante una de esas historias de ascensión y caida que tanto le gustan a Scorsese. Cambiando los miembros de la mafia por los agentes de Wall Street (¿acaso no son los gangsters de nuestra época?), esta película podría conformar una trilogía junto a Uno de los nuestros y Casino perfectamente.



Leonardo DiCaprio llevaba años intentando llevar esta historia a la gran pantalla y viendo el resultado final he de decir que me alegro de que por fin lo consiguiera, puesto que en mi opinión con esta interpretación logra la cima de su carrera. Que un actor tan conocido como él logré que nos olvidemos completamente de quién es y solo veamos a Jordan Belfort en pantalla es algo que no es nada fácil. DiCaprio da el 110 por ciento en esta película, se le nota, se deja la piel para interpretar éste papel, borda absolutamente todos los momentos de la película, desde los cómicos que son los más abundantes, pasando por la magnífica secuencia dramática casi al final con Margot Robbie (único momento que tiene para destacar la actriz australiana, ya que el resto del tiempo es un mero florero), hasta la ESCENA (si, en mayúsculas, los que la habéis visto ya sabéis sin duda a la que me refiero, los que no la hayáis visto, mejor que aún no sepáis nada) en la que DiCaprio demuestra todo su talento en la actuación física y gestual. 

La historia de Belfort se puede resumir en un recorrido que le lleva desde el comienzo de la película, siendo un novato asustadizo ante su jefe (un soberbio Matthew McConaughey, que es el único capaz de robarle planos en toda la película y que curiosamente también es probable que le robe el Oscar a mejor actor éste año), hasta ese discurso final ante sus empleados en el que el orgullo le impide tomar la decisión más inteligente y conveniente para sus intereses. Para que comprendamos ese cambio tan sustancial Scorsese se embarca en su mayor acercamiento a la comedia desde "Jo, que noche". En la mirada del veterano director Belfort es histriónico, excesivo, en definitiva un hijo de puta divertido, lo que en un primer momento puede parecer una decisión un poco arriesgado debido a la historia real del personaje es consecuencia de la decisión que va a tomar Scorsese respecto al modo de narrar la película confiando en la inteligencia del espectador, no hace falta que te acompañe de la mano para indicarte lo que está bien o está mal, el hecho de que te rías con esta película (y lo vas a hacer sin duda), no quiere decir que no logres captar el mensaje crítico hacia la sociedad que representa, un personaje que se pasa media película borracho o drogado, debatiendo sobre si se debe tratar a los enanos como seres humanos o soplando cocaína en el culo de una prostituta ya se define por sí mismo, es un ser sin ningún tipo de asidero moral al que te puedas agarrar para defenderlo o identificarte con él, la hipérbole del sueño y de la mayor ambición de muchos jóvenes a día de hoy, lo quiero todo y lo quiero rápido y me da igual los medios que tenga que utilizar para conseguirlo.



¿Puede ser el exceso el principal defecto de una película que trata sobre los excesos?, pues aunque parezca una redundancia en éste caso lo es. Hay un momento en el que la acción sube hasta la cima de su intensidad y Scorsese se lo juega a todo a seguir en esa cima durante gran parte de la película y eso consigue dos cosas, por una parte que los 180 minutos de su duración pasen volando y por otra que el espectador tenga una sensación de deja vu constante, de esto ya lo he visto y lo he comprendido, no hace falta que me sigas recalcando lo mismo otra vez, por lo que momentos que deberían ser cumbres del film como la discusión final en la casa o la escena del coche queden diluidos entre otras que quizás sean un tanto innecesarias.

En una película en la que el protagonista es dominador tan absoluto de la función es difícil hablar del resto de actores, aunque habría que destacar a Jonah Hill, que decidió rebajar su salario para poder trabajar con Scorsese en la que probablemente vaya a ser una de las decisiones más acertadas de su carrera, ya que realiza su mejor papel hasta el momento, quizás deja la sensación de que en ciertos momentos se interpreta a sí mismo, pero no por ello hay que quitarle mérito, ya que una de las principales labores de un actor es saber escoger bien sus papeles. Como ya dije antes Matthew McConaughey aparece brevemente en la película pero en esos escasos minutos se come literalmente la pantalla, con una conversación en un restaurante con Leonardo DiCaprio que será de lo más recordado de esta película.



En el aspecto negativo pondría a Margot Robbie, tremendamente desaprovechada al margen de mostrar su extraordinario físico, es esta una película en la que los personajes secundarios (pero especialmente los femeninos) al margen del ya mencionado Hill están muy poco desarrollados y que con una mayor atención y cuidado quizás podrían haber ayudado a que esa sensación de hastío que comentaba anteriormente se hubiera rebajado.

Pero pese a todo el ruido mediático de los últimos tiempos tras su sonado éxito de taquilla parece ser que El Lobo de Wall Street tiene muy pocas posibilidades de conseguir algún galardón este domingo por varias causas, en primer lugar al lobby de wall street (evidentemente) no le gusta la imagen que se da de ellos en la película y no le gustaría que tuviera mayor repercusión debido a los premios, por otra parte como ya es sabido los académicos de Hollywood tienen un tinte mayoritariamente conservador y un film como éste no es que sea precisamente de su gusto y por último, en el apartado actoral dónde podía tener mayores posibilidades con las nominaciones de DiCaprio y Hill, parece ser que Dallas Buyers Club le tiene ganada la partida con los más que probables premios a McConaughey y Jared Leto.

Pero si algo deja claro esta película es la demostración de que Martin Scorsese sigue en plena forma (y esperemos que por muchos años) y que Leonardo DiCaprio con premios o sin ellos definitivamente se asienta entre el reducido grupo de actores actuales cuya sola presencia merece que veas una película.

miércoles, 26 de febrero de 2014

Especial Oscar 2014: 12 años de esclavitud

12 años de esclavitud. Título original: 12 Years a Slave

Director: Steve McQueen

Actores: Chiwetel Ejiofor (Solomon Northup), Michael Fassbender (Edwin Epps), Benedict Cumberbatch (Ford), Lupita Nyong'o (Patsey), Sarah Paulson (Mistress Epps), Paul Dano (Tibeats), Brad Pitt (Bass).

Guión: John Ridley. Basado en el libro de Solomon Northup.

Productores: Steve McQueen, Brad Pitt, Dede Gardner, Anthony Katagas, Jeremy Kleiner, Arnon Milchan, Bil Pohlad.

Montaje: Joe Walker

Fotografía: Sean Bobbitt

Música: Hans Zimmer

Producción: Plan B, New Regency, Film4.



Comienza hoy este mini especial que pretende acercar algunas de las favoritas a la ceremonia de los Premios Oscar 2014 y que mejor película para empezar que la considerada favorita en todas las quinielas para ganar la estatuilla a mejor película y que ha arrasado en la mayoría de los premios importantes anteriores con Globo de Oro, Bafta y Critic Choice incluido, además de un buen número de premios de Asociaciones de críticos.

Steve McQueen ya comenzaba a tener un nombre importante en la industria de Hollywood debido a sus anteriores películas "Hunger" y especialmente "Shame" con la que ya consiguió varios premios y nominaciones importantes, especialmente por la labor de su protagonista, pero ha sido gracias a esta película a la que ha conseguido llegar a la cima de su reconocimiento.

12 años de esclavitud se basa en la autobiografía de Solomon Northup, un hombre nacido libre y que fue secuestrado para ser vendido como esclavo. La película parte ya de una premisa muy potente queriendo mostrar uno de los capítulos más vergonzosos de la historia de la humanidad, como es el de la esclavitud, para ello Steve Mcqueen entra de lleno en el tema sin hacer ningún tipo de concesión, te va a mostrar las miserias del ser humano y el espectador va a adoptar el papel de Solomon, es decir, se va a sentir impotente al observar todo lo que pasa a su alrededor, pero no va a poder hacer nada para evitarlo.

Para interpretar a Solomon Northup hacía falta un actor con mayúsculas, alguien que pudiera expresar de igual modo la ira, la confusión, la rabia o la tristeza por su situación, probablemente uno de los mayores aciertos fue la elección de Chiwetel Ejiofor, grandísimo actor aunque quizás algo desconocido para el público en general.



Ejiofor se marca una de esas interpretaciones que marcan la carrera de un actor y que tendría que conducirle al estrellato si es que hay justicia en el mundo del cine. Su Solomon Northup pasa por todos los estados de ánimo posibles durante ésta película, desde la alegría inicial de un hombre feliz con su familia, pasando por el miedo y la confusión cuando es raptado y vendido, la rabia y la ira tras ser consciente de su nueva condición, el miedo en una maravillosa escena con Michael Fassbender (del que hablaremos posteriormente) y un final en el que condensa toda la historia con su mirada y la expresión de su cara. Son tantas las escenas que se podrían destacar de su trabajo que daría para un post exclusivo para él. Probablemente no se vaya a llevar el Oscar al mejor actor ya que ha tenido la mala suerte de competir en un año de grandes actuaciones pero no por ello debería de tener menos reconocimiento.

El otro gran papel de la película se lo lleva Michael Fassbender, habiendo trabajado ya con él en su anterior película, Steve McQueen sabía que no había mejor actor para interpretar a Edwin Epps, un amo salvaje y despiadado y cuya presencia traspasa la pantalla infundiendo el mismo miedo entre los espectadores que el que sienten los esclavos. Fassbender está merecidamente nominado al mejor actor secundario y tiene una dura competencia con Jared Leto y con Barkhad Abdirahman, pero gane o no el premio lo que deja claro con éste papel por si todavía a alguien le quedaban dudas es que estamos ante uno de los mejores actores de la actualidad.

En el apartado actoral destaca también Lupita Nyong'o, bellísima actriz casi desconocida hasta ésta película y que sin duda tiene el papel más agradecido (en el sentido de que es carne de premios) de toda la película, su Patsey, esa niña nacida esclava y criada a base de golpes y abusos demuestra toda la crueldad de la esclavitud con su sola mirada fría. Muy probablemente gane el Oscar a la mejor actriz secundaria y no voy a decir que sea desmerecido ni mucho menos, pero creo que la fuerza del personaje proviene mucho más del guión y de la historia que de la propia actriz que para ser una debutante no lo hace mal ni mucho menos pero no se si tanto como para merecer el galardón. 
En el apartado positivo mencionaría también a Paul Dano, con un breve papel pero lleno de talento y a la probablemente gran olvidada de la película, Sarah Paulson, que borda el papel de mujer malvada y poseída por los celos, capaz de destruir lo que haga falta con tal de conseguir su objetivo.



Pero si estos son los que destacan para bien, también existe un apartado negativo. Brad Pitt probablemente realice una de las interpretaciones más perezosas y descuidadas de su carrera, un personaje tan importante en el devenir de la historia como es Bass debería poseer mucha más fuerza y matices que la que ofrece el también productor de la película. En éste sentido también mencionaría a Benedict Cumberbatch, que si bien no voy a decir que haga un mal papel, porque creo que es casi incapaz de hacerlo, si creo que esperaba mucho más de él sabiendo de su talento. Aunque también hay que reconocer que su personaje no ayuda demasiado para ello.
Esto nos lleva al que creo que es el problema fundamental de la película y es a la desigualdad que existe en la película debido a su guión y montaje, con un gravísimo problema de ritmo, McQueen pretende introducir en nosotros la sombra de la duda con la figura de un amo bueno y con dudas en la parte en la que Solomon se encuentra en la casa de Ford, pero el resultado final es que parece un previo demasiado alargado al momento en que la película despega de verdad y es cuando llega a la casa de Edwin Epps.



Al margen de esa desigualdad en las diferentes partes de la historia, si tuviera que achacar algún defecto a esta película es su torpe manera de escenificar el paso del tiempo, exceptuando el evidente envejecimiento del protagonista, no hay sensación de temporalidad en la película y si nos dijeran que en vez de 12 años de esclavitud fueron 5 no encontraríamos ninguna diferencia.

Pero pese a estos fallos son muchísimos los motivos para considerar a esta película como una de las mejores del año, comenzando por una magnífica dirección de McQueen, adoptando el tono clásico y sin estridencias que requería la historia y con una gran valentía al no querer dar ninguna lección moral ni posicionarse, ya que los hechos hablan por sí mismos, pasando por unas estupendas labores de fotografía, vestuario y producción artística y sobre todo por esas dos auténticas bestias de la interpretación que son Chiwetel Ejiofor y Michael Fassbender.

Los galardones que consiga lo conoceremos el Domingo, pero ya sabemos de la relatividad de los premios y más de los Oscar en los que la promoción y los lobbys internos tienen tanta importancia a la hora de elegir los ganadores como la propia calidad de su trabajo. Pero gane o no, esta es una de las películas más recomendables de éste año y que ningún buen amante del cine se debería perder.

martes, 25 de febrero de 2014

Adios a Harold Ramis

Hoy ha fallecido Harold Ramis, el actor, guionista y director murió a los 69 años por una complicación en la enfermedad que padecía desde hacía algún tiempo, una vasculitis inflamatoria autoinmune.
Con la muerte de Ramis se va uno de los grandes del mundo de la comedia que quizás nunca recibió todo el reconocimiento que se merecía.
Conocido popularmente por su papel de Egon Spengler en "Los Cazafantasmas", pudo presumir de tener una carrera no demasiado prolífica pero con varios repuntes de éxito de público y crítica.

Su carrera comenzó a despegar a finales de los 70 y principio de los 80 con películas como "Desmadre a la americana", "El pelotón de los chiflados", "Los incorregibles albóndigas" o "El club de los chalados" pero fue a mediados de los 80 cuando alcanzó la fama formando equipo junto a Bill Murray y Dan Aykroyd y dirigidos por Ivan Reitman con Ghostbusters, película en la que también se encargó del guión. Debido a su gran popularidad pocos años después el mismo equipo repitió éxito comercial (aunque con algo menos de calidad) con la segunda parte. Tras varios años escuchando hablar de la posibilidad de una tercera parte, parece difícil que se pueda realizar tras éste revés.
Si bien su carrera como actor no fue mucho más allá tras éste gran éxito, yo siempre recordaré con mucho cariño su papel en la también maravillosa comedia (como no) "Mejor ... imposible", un personaje lleno de bondad y simpatía que es la imagen que proyectaba el propio Harold Ramis.


Más destacada fue sin embargo su carrera, como director, con buenas comedias como "Una terapia peligrosa" o la divertidísima y en mi opinión muy infravalorada "Mis dobles, mi mujer y yo", una película llena de enredos y con un gran Michael Keaton, especialmente inspirado en los momentos de slapstick o humor físico de la película. Pero sin duda su gran éxito como director y guionista, fue "Atrapado en el tiempo", y es que la película en la que un genial Bill Murray vive su particular Día de la Marmota repetido en innumerables ocasiones, es una de las mejores comedias de las ultimas décadas.


Con su muerte perdemos a uno de los grandes de la comedia, pero por suerte, podremos seguir recordándole revisionando sus obras. Un maratón con "Desmadre a la americana", "Mis dobles, mi mujer y yo" y "Atrapado en el tiempo" será mi homenaje particular éste fin de semana a éste gran cómico.
Descanse en paz.


jueves, 20 de febrero de 2014

Jack Ryan: Operación Sombra

Jack Ryan: Operación Sombra. Título original: Jack Ryan: Shadow Recruit.


Director: Kenneth Branagh


Actores: Chris Pine (Jack Ryan), Keira Knightley (Cathy Muller), Kevin Costner (Thomas Harper), Kenneth Branagh (Viktor Cherevin), Lenn Kudrjawizki (Constantin), Peter Andersson (Dimitri Lemkov).


Guión: Adam Cozard, David Koepp. Basado en los personajes creados por Tom Clancy.


Productores: David Barron, Lorenzo di Bonaventura, Mace Neufeld, Mark Vahradian.


Montaje: Martin Walsh


Fotografía: Haris Zambarloukos


Música: Patrick Doyle


Producción: Paramount Pictures, Skydance Productions, Buckaroo Entertaiment.



En una época en la que todas las compañías buscan una nueva franquicia que les pueda asegurar buenos resultados económicos y la posibilidad de varias secuelas para estirar el negocio, el reboot del personaje de Jack Ryan tenía que llegar tarde o temprano, para ello Paramount Pictures eligió a Chris Pine como nuevo protagonista de los libros de Tom Clancy, debido a su cada vez mayor popularidad después de ser el nuevo James T. Kirk en el reinicio de Star Trek y dejó la película en manos de Kenneth Branagh, el otrora especialista en adaptar a Shakespeare que parece que está virando el rumbo de su carrera hacia las películas de acción después de ser el encargado también de dirigir la primera película de Thor para Marvel.

En Jack Ryan: Operación Sombra nos encontramos a un protagonista llevado a la actualidad al que el atentado del 11S le hace dar un rumbo a su vida y por lo que decide alistarse a la Marina de EEUU, sin embargo un accidente de helicóptero (magnificamente rodado por Branagh) le manda a un centro de rehabilitación dónde conocerá a Cathy Muller (Keira Knightley) y el agente Thomas Harper (Kevin Costner) comienza a interesarse por sus habilidades como analista económico.



Operación Sombra es una vuelta al thriller político - económico que abundaba en los años 90 y que parece que en la actualidad se ha perdido un poco en favor de las películas de superheroes y de acción pura. Cuando Jack Ryan, analista económico en una gran firma de Wall Street (con una doble vida debido a su trabajo para la CIA) descubre una conspiración desde Rusia que amenaza con echar abajo todo el sistema económico estadounidense, su mentor Thomas Harper le dice que él es el único que tiene la capacidad para realizar el trabajo sobre el terreno y debe viajar a Rusia.

Si algo se puede destacar de ésta película son sus altibajos en todos los niveles de su producción. A nivel actoral Chris Pine encaja perfectamente como éste nuevo Jack Ryan, reconozco no haber leído las novelas de Tom Clancy, pero me parece mucho más creíble éste héroe de acción, que se muestra continuamente vulnerable a nivel físico, que tiene habilidades debido a su formación como marine, pero que no se vuelve de la noche a la mañana en un experto en armas y en todo tipo de luchas. La sola presencia de Kevin Costner le da porte y sobriedad a la figura del mentor de Ryan, aunque no se puede negar que en ciertos momentos actúa con el piloto automático, pero es uno de esos actores que ha llegado a una edad y unos conocimiento en la que incluso dejándose llevar salva la situación de un modo más que favorable. En el aspecto negativo nos encontramos con una Keira Knightley y un Kenneth Branagh bastante flojos, aunque creo que más debido a los problemas del guión que a su propia actuación, que también es algo perezosa, especialmente en el caso de Branagh.


Tanto el guión de Adam Cozard y David Koepp como el montaje de Martin Walsh navegan entre dos rumbos paralelos, por un lado cuando se adentran en la acción y la intriga, la película sube muchísimos enteros con varias escenas que alcanzan el notable alto como el citado accidente de helicóptero o el primer enfrentamiento de Jack Ryan con uno de los secuaces de Cherevin y especialmente las escenas en las que la adrenalina sube a sus mayores cotas, como la entrada en las oficinas de Cherevin con un guión que sabe hacer que la tensión se mantenga en un continuo increscendo, o la persecución en las calles de Moscú, ejemplo de buen montaje, en la que continuamente sabemos dónde está cada uno en cada momento y hacia dónde se dirigen, algo especialmente de agradecer en ésta época en la que abundan los montajes confusos y mareantes.
Pero si destaca en el terreno de la acción también hay que decir que fracasa estrepitosamente en la creación de personajes, más allá de la figura del protagonista el resto están completamente desdibujados, la química entre Chris Pine y Keira Knightley es completamente nula y eso es porque el guión no les da ocasión a hacerlo en la mayor parte de la película y cuando quiere hacerlo ya es demasiado tarde, por otro lado el personaje de Kenneth Branagh es un malo de lo más arquetípico, cuyas motivaciones apenas se apuntan en pequeños detalles y que en ningún momento da la sensación de infundir temor que necesitaría un personaje como éste.

Pero he de decir que pese a todos los fallos que pueda tener, me parece una más que digna película de acción, que es honesta consigo misma, ya que desde un principio te está diciendo a la cara, te voy a ofrecer 105 minutos en los que te voy a mantener pegado a la silla con escenas repletas de acción y tensión, y eso lo cumple, pese a que por el camino tenga que sacrificar la creación de personajes y el desarrollo dramático de la historia, pero en ningún momento llega a cansar ni a aburrir. 
Lamentablemente la película no ha funcionado demasiado bien a nivel comercial, aunque tampoco se puede decir que haya sido un fracaso, ya que en el mercado internacional si que ha tenido más éxito y dudo que tengan perdidas, pero de ninguna de las maneras ha sido un pelotazo económico, yo creo que se merecía mejor suerte en éste sentido, películas bastante más flojas han logrado mejores taquillas que ésta, pero es difícil (aunque espero equivocarme) que veamos una continuación de ésta saga y es una pena, ya que con un poco más de esfuerzo en el guión se podría conseguir una franquicia de acción más que interesante.

En definitiva, se trata de una película de espías de toda la vida, con muy buen ritmo en los momentos de acción y secuencias llenas de emoción y tensión, una opción más que recomendable si queréis pasar un rato divertido sin pensar demasiado y buscarle los fallos (que los tiene) al film.

lunes, 17 de febrero de 2014

.... y acción

Comienzo hoy éste blog tras mucho tiempo dándole vueltas en la cabeza. Siempre he sido un apasionado del cine, de la literatura, de la televisión, del deporte, de muchas cosas ... y siempre me ha gustado hablar de ello y compartir mi opinión con los demás. Existen redes sociales que pueden servir para esto, pero estas herramientas no son del todo de mi gusto, por lo que he pensado que quizás un blog podría servir para dar rienda suelta a mis ganas de compartir mis ideas y opiniones.
El cine será el motivo principal del blog, pero también la literatura y la televisión y es probable que de vez en cuando se crucen el deporte y la música por aquí, en fin, una miscelanea de las cosas que me gustan y por las que puedo tener interés en algún momento.
Simplemente por el afán de compartir mi opinión y quizás poder ayudar y entretener a los demás.
Espero que en breve comience un ritmo regular de publicación de posts y que os puedan gustar.