viernes, 31 de enero de 2020

CutreCon 9: DinoXplotaition

Dentro del universo festivalero existe un subgrupo aún más tarado de lo que ya de por sí conlleva tirarse 7 - 10 días viendo cine sin parar y sin apenas dormir. Estoy hablando de los amantes de los festivales y sesiones más gamberras. Si los pusiéramos en escala ascendente, existe el cachondeito de las sesiones nocturnas de Sitges en Retiro, la semana de cine de terror y fantástico de San Sebastián directamente pasa a convertirse en una fiesta. Un paso más allá está la ya mítica mandanga de la Muestra Syfy pero todos sabemos que hay una última frontera, la de adentrarse en los peligrosos territorios de bizarradas extremas como la CutreCon en Madrid o Peor, Imposible en Gijón.

Así que allí estaba yo, algo tímido y temeroso en mi primera experiencia en la CutreCon y es que como en todos los festivales había una serie de códigos o bromas internas que aún no conocía, pero en estos casos ya sabes, relájate y disfruta, tararear a grito pelado la música ambiente era el primer paso, a partir de ahí todo fluye y te conviertes en uno más de esa panda de locos que se proponía a disfrutar con un par de casposidades con dinosaurios como protagonistas.

Antes de eso, una pequeña ceremonia para entregar un premio honorífico a Silvia SuperStar por su labor en el género, con presencia incluida de Carlos Areces (no se pierde una) disfrazado de Caca Man, pero esa no era la gran sorpresa de la noche, mejor que yo os la cuentan aquí:



Tras el potagate y más de media hora de limpieza empezaba lo bueno con VelociPastor film ya de culto entre los amantes del género que se había hecho famoso ya solo por la locura de su propuesta, la de un sacerdote capaz de convertirse en velociraptor que termina luchando contra una banda de malvados ninjas.

Financiado en parte gracias a una exitosa campaña en Kickstarter el film da todo lo que promete y es una cinta tremendamente autoconsciente y paródica que imita al cine cutre de Serie Z con actuaciones y efectos absolutamente ridículos, giros de guión loquísimos, micrófonos colándose en plano, giros de guión loquísimos, localizaciones reutilizadas mil veces o extras despistados. Todo ello al servicio de una película repletísima de gags que da lo que promete, risas a los amantes de la caspa y la cutrez.
Imprescindible para cualquier maratón con amigos a los que le guste el género, todo un acierto.


Y con el buen sabor de boca, el nuestro, el de vomiton lo dudo, nos lanzábamos a por la segunda de la noche, Tammy and the T Rex mítica película noventera por su tremendo fracaso comercial con estrellas de la talla de Denise Richards o el malogrado Paul Walker que a buen seguro trataron de olvidar durante su carrera. Si el film ya era de culto para los amantes del cine trash, este año vuelve a estar de actualidad tras restaurarse en 4K y sobre todo recuperar el montaje original que incluye todas las escenas gore y la intención inicial de comedia negra que su director le quiso dar antes de que los productores de la época decidieran recortar para convertirla en una comedia romántica.

Lo "brillante" de la idea se entiende cuando descubrimos que el film trata sobre el romance entre un T-Rex con el cerebro de un fallecido Paul Walker y su novia mientras aún estaba vivo. En esta nueva versión Tammy and the T Rex se convierte en lo que pretendía ser en un principio, una comedía desvergonzada y trash en claro homenaje a la serie B ochentera cargada de gore y momentos absolutamente absurdos y desternillantes.

Si bien es menos loca y acelerada que VelociPastor se aprecia en ella una cutrez mucho más auténtica y menos impostada lo cual le da un plus de disfrute y convierte a ambos films en una sesión doble perfecta.


Por supuesto no hace falta aclarar que esta sesión doble estuvo llena de gritos a la pantalla, chistes entre el público, aplausos, vítores o abucheos, además de experiencias tan intensas que es mejor no contar por aquí y dejar para que lo descubráis en vivo y es que si sois de los que disfrutáis con este tipo de sesiones en las que la película es casi lo de menos y lo importante es la experiencia conjunta de disfrute ante semejantes bodrios os aseguro que la CutreCon es algo que tenéis que experimentar en vuestras propias carnes.

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