martes, 14 de julio de 2020

La vieja guardia

La vieja guardia. Título original: The Old Guard

Director: Gina Prince Bythewood

Actores: Charlize Theron, KiKi Layne, Matthias Schoenaerts, Marwan Kenzari, Luca Marinelli, Chiwetel Ejiofor, Harry Melling

Guión: Greg Rucka (Basado en su propio cómic)

Productores: Charlize Theron, Don Granger, Dana Goldberg

Montaje: Terilyn A. Shropshire

Fotografía: Barry Ackroyd

Música: Volker Bertelmann, Dustin O'Halloran

Producción: Netflix, Skydance Media, Marc Platt Productions, Image Comics, Dune Films, Denver and Delilah Productions


Tras el éxito cosechado con Tyler Rake Netflix vuelve a la carga en su apuesta por las películas de acción con La vieja guardia basada en el cómic homónimo de Greg Rucka, encargado también de la adaptación a la gran pequeña pantalla de su propia historia.

El argumento de La vieja guardia, parece un pequeño batiburrillo de cosas ya vistas: un grupo de mercenarios trabaja en secreto en misiones especiales que solamente ellos pueden llevar a cabo, todo muy normal si no fuera porque oh sorpresa, todos ellos son inmortales y su principal propósito es ayudar a la humanidad a lo largo de su historia. A falta de innovación, la extraña mezcla de ingredientes ya conocidos puede resultar también atractiva.

Rápidamente el film nos mete en situación mostrando sus puntos fuertes, una apuesta decidida por la acción, plantearnos el misterio y las características de la inmortalidad de los protagonistas y un grupo de personajes interesantes y con personalidad.  Por otra parte, la trama central, la de la farmacéutica que trata de descubrir y robar el secreto de su inmortalidad avanza a trompicones con un villano de opereta que nunca llega a alcanzar cotas de amenaza real para nuestros héroes.




En el lado positivo de la balanza, la evidencia de que Charlize Theron, tras el tropezón inicial de Aeon Flux y con el respaldo de su gloriosa Imperator se ha convertido en una heroína de acción de primera categoría capaz no solo de llevar el peso de un film de este tipo si no de elevarlo con su sola presencia. También merece la pena remarcar el acierto y la naturalidad (ya era hora) con la que se presenta una pareja homosexual o la estupenda labor de Kiki Layne como aprendiz en su historia de orígenes. 

Quizás el mayor problema del film es la tremenda desigualdad entre sus aspiraciones y lo que realmente es ya que sus coreografías y escenas de acción, las cuales deberían ser su punto fuerte, aparecen deslucidas, repetitivas y carentes de algún tipo de espectacularidad cuando se la compara con coetáneos como John Wick o el ya nombrado Tyler Rake, sin embargo sus personajes, esos a los que dedica tan poca atención, son los que consiguen dar cierto empaque a una historia que apenas ahonda en ellos y que nos deja con ganas de conocerlos mucho más una vez que la parte lúdica ha sido en cierto modo decepcionante. 



La vieja guardia deja con cierta sensación de episodio piloto algo alargado en el que se ha querido presentar el formato sin desvelar en este primer vistazo sus mejores cartas para dejarnos con ganas de más, algo habitual en el mundo de las series pero arriesgado en el de los largometrajes. Por fortuna ese claro continuará con el que nos deja el film y su éxito en la plataforma parece que nos puede dar la oportunidad de seguir adelante con una historia a priori atractiva que puede ganar puntos si se decide a explorar en la historia de nuestros protagonistas y sus poderes y sobre todo aumentar exponencialmente la espectacularidad de sus escenas de acción. 

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