viernes, 4 de junio de 2021

Uno de nosotros

 

Let_him_go
Uno de nosotros. Título original: Let him go

Director: Thomas Bezucha

Actores: Diane Lane, Kevin Costner, Lesley Manville, Will Brittain, Kayli Carter, Jeffrey Donovan, Ryan Bruce

Guión: Thomas Bezucha, Larry Watson (Basada en su novela)

Productores: Thomas Bezucha, Mitchell Kaplan, Paula Mazur

Montaje: Jeffrey Ford, Meg Reticker

Fotografía: Guy Godfree

Música: Michael Giacchino

Producción: Mazur / Kaplan Company



Qué tendrá el western que llevan años queriendo enterrarlo y siempre resucita, ya sea de modo más clásico como hizo Eastwood allá en los 90 o la estupenda Los hermanos Sisters hace bien poco, con actualizaciones como Comanchería o como acicate de otros géneros, últimamente el thriller fronterizo (No es país para viejos, Sicario, Frío en Julio). 

Sea como sea el género se transforma o mantiene fiel pero siempre permanece, en esta ocasión en forma de esos llamados neo westerns, donde los duelos al sol se sustituyen por una cena familiar de tensión incontrolable y las largas cabalgatas a caballo por viajes en el Chevrolet familiar recorriendo una América en lucha interna entre el paso a la modernidad y la sanación de las duras cicatrices de su violento pasado.

Uno de nosotros nos muestra una familia tradicional del género, con el antiguo sheriff, el rancho de caballos y la nueva generación llamada a tomar su relevo respetando las viejas tradiciones. Sin embargo el drama azota rápidamente al film que desde el comienzo toma ese tono crepuscular que le confiere su pareja protagonista, Kevin Costner y Diane Lane parecen haber llegado a su madurez para ser la pareja perfecta, en esta ocasión hierático y contenido él, feroz y resolutiva ella. 

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La lucha por la familia como reza su poster promocional será el motor de un film que se transforma casi en una road movie recorriendo esa nueva América durante la primera parte de su metraje mientras lentamente se van plantando las semillas de su brutal desenlace, un tenso thriller que juega con la contención y las expectativas. La familia Weboy podría formar parte de cualquier galería de villanos del viejo Oeste y es que Lesley Manville es una matriarca absolutamente terrorífica bien acompañada por un inquietante Jeffrey Donovan. 

La colisión parece inminente y sin embargo Thomas Bezucha es capaz de alargar la tensión hasta el límite, cuando la cuerda se rompe y la violencia estalla de la manera más terrorífica como en la inolvidable escena del Motel.

En el debe del film queda un clímax final algo insatisfactorio por su mala planificación y peor ejecución y sin embargo es tanto el peso de todo lo bueno anterior que particularmente decido dejarlo a un lado y disfrutar de una película que hace honor a un género que se resiste a morir y de vez en cuando nos vuelve a recordar su enorme potencial para contar todo tipo de historias.

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